El Cierrón, área de descanso
El Cierrón se ha convertido en un lugar de reposo y descanso para muchas aves. Ayer lo visitaban un pequeño grupo de Garcillas bueyeras (Bubulcus ibis, Garcia de gües) que dedicaron su tiempo al aseo personal. Son muchas las que se pueden ver desperdigadas por toda la Ría e incluso por fuera de sus límites. En breve desaparecerán para irse a criar.
2 comentarios:
¡Cuánto que aprender de las aves! Su eterno estar de paso, su cíclico tránsito, su saber vivir en la tierra y en el aire y en el agua... Desde estas tierras de Andalucía donde ahora fugazmente estoy, entiendo mejor esta condición migratoria esencial del ave. Gracias, Bernardo, por tus testimonios fotográficos. Tu compañero del camino Paco Ayala.
Hola Paco, aprender de ellas mucho, pero para saber también lo que no se debe hacer, que nosotros no tenemos alas y sí raíces. Un abrazo y hasta la vuelta, que la semana será dura.
Salud
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