Cumpliendo objetivos
Cuatro meses después de ver la caseta de observación de El Cierrón medio destrozada, ayer a primera hora de la mañana dos operarios procedían a repararla. Cuando vimos los destrozos debo reconocer que pensé que la administración igual preferiría no repararla buscando una buena razón para ello, como cuando en otra ocasión algún gamberro se cargó la puerta de entrada y apareció tirada al pie de la charca. En ese momento la brillante idea fue dejar la caseta para siempre sin puerta porque así se evitaba tener que cerrarla y abrirla y, lo mejor de todo, que no se atrincherara la gente (parejas) dentro. En este último acto vandálico, con cuatro tablas inferiores arrancadas, la excusa para no arreglarla podría ser la ventilación sana de las extremidades inferiores de los usuarios, además de poder detectar desde lejos si había alguien dentro o no. Pensé mal, lo admito. La administración competente, tres días antes de terminar el año hizo los deberes. Con tanta emoción les di doblemente las gracias a los obreros: por dejarme hacer la foto y por terminar el año de buena manera.
2 comentarios:
Se han puesto las pilas. Enhorabuena. Una sugerencia para próximos arreglos de mantenimiento, que los habrá, lógicamente y aunque solamente sea por el deterioro del uso cotidiano. La sugerencia es la siguiente:
Que pongan en la ventana que da frente a la puerta de entrada y en las que están a su izquierda una zona más baja accesible a los que entren a mirar y tengan problemas de movilidad (sillas de ruedas, muletas) o sean niños pequeños. En estos momentos solamente se puede mirar desde ahí si lo haces de pie. No sucede lo mismo con las ventanas que están a la derecha de la puerta. Desde ellas sí que puedes mirar sentado.
Un abrazo, Bernardo. Y Feliz Año 2018.
Nacho Vega.
Buena sugerencia Nacho. Es de agradecer que hayan puesto la puerta y las ventanas.
Feliz Año y Salud.
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