

Llevamos una primavera muy como las de antes y ésto está desquiciando a la gente, harta ya de tanta agua , nubes y niebla. Pero todos sabemos que gracias al agua, en sus distintas versiones, tenemos estos maravillosos verdes. Este fin de semana estuve por Poreñu con Paco de guía. Me enseñó un trozo de bosque maravilloso, limpio, húmedo, lleno de vida y de sonidos con dueños. Como recuerdo de esa mañana de
orbayu y
borrina y de ese bosque, estas dos fotos de setas. Las del suelo,
Amanita junquillea y las que parasitan al viejo y cansado cerezo,
Laetiporus sulphureus.
Será una buena primavera para las setas.