Unos se caen y a otros los tiran

Con los temporales de este invierno, uno de los árboles notables del casco urbano de La Villa se desplomó. Se trata de un Cedro japonés (Cryptomeria japonica) que se encuentra enclavado en el antiguo jardín de la Casa de Cardín. A muy pocos metros de este árbol, los servicios municipales talaron un precioso haya (Fagus sylvatica, Faya), enorme y en perfecto estado pero que a alguien molestaba. Eso sí, a la vez se hacen caminitos y senderos por la zona, para recuperarla. Es preocupante y legendaria en Villaviciosa la falta de sensibilidad hacia los árboles por parte de los responsables municipales.